Comodoro Rivadavia, Esquel, Puerto Madryn y Trelew fueron algunas de las ciudades en las que estudiantes, docentes, no docentes y la comunidad en general, recorrió las calles con banderas y carteles en defensa de la universidad pública.

En los días previos a la marcha, muchos usuarios de las redes sociales contaron sus historias personales con la universidad pública e invitaron a la reflexión. Uno de los posteos que se hizo viral fue el de Paula Vera, quien escribió en Facebook: “Yo hija de un padre analfabeto, criada en una chacra de Sarmiento junto a mi abuela, puedo decir que soy ABOGADA gracias a la universidad pública y gratuita de Puerto Madryn. Anhelo que más chicos y chicas puedan continuar sus estudios y cumplir sus sueños, que las oportunidades sean para todos”.

También se viralizó una carta abierta publicada en El Extremo Sur y escrita por Jorge Spíndola, poeta comodorense y profesor en la carrera de Letras de la UNPSJB, en la que entre otras cosas expresa que “como académico y profesor universitario, nieto de paisanos williches, trabajadores rurales, abuelas lavanderas y empleadas domésticas sin aportes jubilatorios patronales, yo sí creo en la Educación Pública”.

Luego de la marcha, los testimonios incluyeron sensaciones y reflexiones respecto de la convocatoria que colmó las calles. En diálogo con Ruido!, Juliana Costes Rosado, estudiante del profesorado de Letras en la UNPSJB de Comodoro Rivadavia, comentó que “me pareció fundamental que todas las personas que tuvieron la posibilidad asistieran. Todas las personas que pasamos por la universidad pública, pero también todas las personas que tenemos familiares que pasaron por la universidad pública, que tenemos amigos, conocidos, compañeros. Y también las que quisieran en un futuro entrar a la universidad o que sus hijos formen parte”.

Respecto de la presencia en las calles, expresó que “todavía estamos construyendo un discurso o una posición después de las elecciones pasadas, todavía estamos reconfigurando el panorama. Es necesario reencontrarnos entre nosotros, reconocer cuales son nuestros acuerdos, cuáles son nuestras posturas en común y de qué manera estamos de acuerdo a expresarlas”.

También conversamos con Camila Orellana, consejera estudiantil de la Agrupación de Estudiantes Independientes (AEI) de la UNPSJB en Comodoro Rivadavia, quien expuso que asistió a la marcha porque “como estudiante que viene de otra ciudad (Las Heras, Santa Cruz) me parece tan valioso que la educación sea pública y accesible para todos. En mi ciudad por ejemplo solo hay una o dos carreras que es de una extensión de la UNPA, entonces me parece que hay que darle valor a nuestra universidad, así como a todas las que hay en el país”.

La estudiante definió a la educación como el pilar de nuestra sociedad. “Yo soy hija de una docente que todos los días hace más que solo ir a trabajar, cuando empieza el invierno por ejemplo, junta camperas de abrigo para sus estudiantes. Entonces, creo que ella me enseñó que la educación no es sólo ir a una institución sentarse y escuchar o dar clases” declaró. Además, celebró la masividad de la convocatoria, ya que considera que “el día de ayer demostramos que no hay ideologías o diferencias que nos fragmente como sociedad y nos distraigan de una lucha colectiva como lo es la Educación pública, gratuita, científica, laica y de calidad”.

Los testimonios de los jóvenes son muchos y muy valiosos. Cada uno de ellos asocia a la universidad con una parte sumamente importante de sus vidas. Así lo expresaba también Constanza Benítez, estudiante de la Licenciatura en Comunicación Social de la UNPSJB: “más allá de que yo hoy asisto a una universidad pública y sé lo que significa, veo lo que significa para muchas otras personas, gente que se ha recibido en la universidad y que le ha cambiado la vida, gente que hoy mismo hace fuerza para poder venir a la universidad de acá de Comodoro Rivadavia desde otros pueblos, porque es un sueño”.

Un sueño, un refugio, un lugar de encuentro. Todas estas imágenes son las que los estudiantes vinculan con la universidad pública. “Más allá de querer recibirse y tener un título, creo que es un refugio para muchas personas que se toman el tiempo de alimentar su cerebro, no solo con textos y con libros, sino también con relaciones porque obviamente se nuclea un grupo de personas muy diverso y te cambia la vida personalmente” dijo Constanza.

Sobre la marcha del 23 de abril, la estudiante manifestó que “si bien uno se siente mal por estar luchando por algo que no debería ponerse en duda, fue lindo porque creo que hubo una masividad de gente, un grupo enorme y todos unidos por lo mismo, porque a todos nos atraviesa como sociedad”.

Se estima que en todas las manifestaciones convocadas por la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, en las sedes de Comodoro, Trelew, Puerto Madryn y Esquel, la convocatoria superó la cifra de 2000 asistentes. En Comodoro Rivadavia, la movilización fue acompañada por el intendente Othar Macharashvili y el viceintendente Maximiliano Sampaoli, así como también de diversos movimientos sociales y agrupaciones.

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